Nuevas normas para impulsar los organismos nacionales de igualdad

El martes, las comisiones de Derechos de la Mujer y Empleo adoptaron su posición sobre nuevas normas para dotar a los organismos nacionales de igualdad de más competencias, recursos e independencia.

Los eurodiputados quieren que los organismos nacionales de igualdad -instituciones públicas que protegen y prestan asistencia a quienes sufren discriminación- sean totalmente independientes de influencias externas a la hora de desempeñar sus tareas, decidir sobre sus objetivos y acciones y, en particular, en lo que respecta a su estructura jurídica, responsabilidad, presupuesto, personal, comunicación y organización. El proyecto de posición del Parlamento sobre la propuesta de ley que introduce nuevas normas para los organismos de igualdad fue aprobado por las comisiones de Derechos de la Mujer y Empleo con 48 votos a favor, 8 en contra y 7 abstenciones.

Se necesitan recursos suficientes para trabajar con eficacia

Según los eurodiputados, la falta de recursos humanos, materiales, técnicos y financieros adecuados y estables dificulta la capacidad de los organismos de igualdad para trabajar con eficacia. Por ello, los Estados miembros deben garantizar que estos organismos reciban una financiación adecuada, puedan contratar la cantidad necesaria de personal cualificado y dispongan de locales e infraestructuras apropiados para llevar a cabo sus tareas con eficacia. Los organismos de igualdad también deben poder gestionar sus finanzas de forma independiente.

Apoyo a quienes han sufrido discriminación

Según el proyecto de posición del Parlamento, los Estados miembros tendrían que garantizar que los organismos de igualdad puedan prestar asistencia gratuita a las personas que hayan sufrido discriminación. Los organismos de igualdad tendrían competencias para investigar, a raíz de una denuncia o por iniciativa propia, una posible violación de la igualdad de trato. A las personas que hayan sufrido discriminación se les ofrecerían medios alternativos para resolver su conflicto, como la mediación. Para poder hacer frente a la discriminación estructural, los diputados también quieren que los Estados miembros garanticen que un organismo de igualdad pueda iniciar por sí mismo un procedimiento judicial.