La Comisión presenta propuestas adicionales para luchar contra los precios de la energía y medidas para digitalizar el sector

La Comisión ha propuesto un nuevo Reglamento de emergencia para hacer frente a los elevados precios del gas en la UE y garantizar la seguridad del suministro este invierno, el cual contiene los siguientes elementos principales:

• La agregación de la demanda de la UE y la compra conjunta de gas para negociar mejores precios y reducir el riesgo de que los Estados miembros pujen entre sí en el mercado mundial.
• La propuesta de un mecanismo de corrección de precios con el fin de establecer un límite dinámico de precios para las transacciones en la bolsa del gas del TTF, y una banda de precios temporal para evitar subidas extremas.
• Normas de solidaridad por defecto entre Estados miembros en caso de escasez de suministro; y una propuesta para crear un mecanismo de asignación de gas para los Estados miembros afectados por una emergencia.

El Pacto Verde y el  REPowerEU exigen una transformación profunda de nuestro sistema energético, que debe ser más interactivo e inteligente para ayudar a los consumidores a aprovechar los beneficios de la transición ecológica. Por ello, la Comisión ha presentado un plan de acción en el que destaca cómo las nuevas tecnologías pueden ayudar a mejorar el uso eficiente de los recursos energéticos, facilitar la integración de las energías renovables y ahorrar costes para los consumidores y las empresas.

Resulta evidente que la guerra de Putin contra Ucrania está afectando gravemente a los mercados energéticos globales y europeos, y es la clase trabajadora quien está siendo víctima de esta crisis. Elaumento desbocado de los precios de todos los servicios y productos, incluidos los básicos, está incrementando las desigualdades existentes y haciendo insostenible la situación en los hogares, especialmente los de las personas vulnerables y los de la clase trabajadora con salarios más bajos.

La Unión Europea y los Estados miembros tienen la responsabilidad de tomar medidas urgentes para hacer frente a la crisis del coste de la vida. En este sentido, desde UGT, aunque acogemos con satisfacción las medidas acordadas, reclamamos fuertes subidas salariales,así como medidas para promover la negociación colectiva como la mejor manera de lograr una remuneración justa y una economía sostenible.

Criticamos a su vez que no se hayan presentado medidas sociales de ningún tipo en este nuevo reglamento, ya que consideramos esencial la implementación de ayudas dirigidas a hogares de personas trabajadoras con bajos ingresos que luchan por pagar sus facturas energéticas, alimentarse adecuadamente y pagar el alquiler o la hipoteca. No se puede esperar que personas en situación de pobreza paguen facturas inasequibles, ni podemos permitir que tengan que elegir entre comer o pagar los recibos.

Nuestro sindicato apoya una transición ecológica justa en la política energética europea basada en la solidaridad, la sostenibilidad, la seguridad del suministro y la asequibilidad. Asimismo, defendemos una reforma profunda y urgente del mercado energético que incluya un verdadero límite a los precios, y un impuesto sobre los beneficios extraordinarios, junto con otras medidas para frenar la especulación con los productos básicos, como la limitación de los dividendos.