Mayor protección de los consumidores frente a los daños causados por productos defectuosos

Las nuevas normas garantizarán a las víctimas una indemnización justa cuando productos defectuosos, incluidos los digitales o reacondicionados, les causen daños físicos y psicológicos.

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Con 33 votos a favor, 2 en contra y ninguna abstención, las comisiones de Asuntos Jurídicos (JURI) y Mercado Interior y Protección del Consumidor (IMCO) aprobaron su posición sobre las normas actualizadas que regulan la responsabilidad de los operadores económicos por daños causados por productos defectuosos.

El objetivo de la nueva legislación es eliminar las diferencias entre los Estados miembros y responder adecuadamente a la aparición de nuevas tecnologías (como la IA), la transición hacia un modelo económico circular y el aumento de las compras en línea (incluso desde fuera de la UE).

Operador responsable en la UE

El proyecto legislativo pretende garantizar que incluso cuando algo defectuoso se haya comprado fuera de la UE, haya una empresa radicada en la UE que pueda ser considerada responsable de los daños que cause. Según los eurodiputados, en caso de que no se pueda encontrar una empresa responsable, los consumidores podrían seguir siendo indemnizados a través de los sistemas nacionales.

Procedimiento de indemnización más sencillo

La propuesta pretende simplificar el procedimiento en torno a la carga de la prueba (es decir, la necesidad, para obtener una indemnización, de demostrar que el producto era defectuoso y que ello causó el daño sufrido). Las personas perjudicadas pueden solicitar a un tribunal que ordene al operador revelar pruebas que puedan ayudarles a reclamar una indemnización. También anula el umbral mínimo de daños de 500 euros.

Los eurodiputados quieren que las autoridades nacionales de protección de los consumidores les orienten sobre sus reclamaciones de indemnización.

Ampliación del periodo de responsabilidad y ningún impacto en el software libre

Según el texto aprobado, será posible reclamar no sólo por daños físicos, sino también por daños psicológicos reconocidos médicamente y por la destrucción o corrupción irreversible de datos (por ejemplo, el borrado de archivos de un disco duro) cuando la pérdida económica supere los 1.000 euros.

Además, los eurodiputados amplían el periodo de responsabilidad de los 20 años propuestos por la Comisión a 30 en casos excepcionales en los que los síntomas tardan en aparecer. Para impulsar la innovación, las normas no se aplicarán al software gratuito de código abierto.