La Comisión de Asuntos Jurídicos del PE da luz verde al proyecto de directiva sobre diligencia debida

Este proyecto de directiva, acordada con los gobiernos de la UE, obliga a las empresas a mitigar su impacto negativo sobre los derechos humanos y el medio ambiente.

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Los eurodiputados de la comisión de Asuntos Jurídicos aprobaron con 20 votos a favor, 4 en contra y ninguna abstención las nuevas normas, denominadas de «diligencia debida», que obligan a las empresas a paliar el impacto negativo que sus actividades tienen sobre los derechos humanos y el medio ambiente, incluyendo la esclavitud, el trabajo infantil, la explotación laboral, la pérdida de biodiversidad, la contaminación y la destrucción del patrimonio natural. La obligación de prevenir, poner fin o mitigar sus efectos negativos también afecta a los socios de las empresas en las fases anteriores de la cadena de producción, que trabajan en el diseño, la fabricación, el transporte y el suministro, y a los socios en las fases posteriores, incluidos los que se ocupan de la distribución, el transporte y el almacenamiento.

Ámbito de aplicación y plan de transición

Las normas se aplicarán a las empresas de la UE y de fuera de la UE y a las empresas matrices con más de 1.000 empleados y un volumen de negocios superior a 450 millones de euros, así como a las franquicias con un volumen de negocios superior a 80 millones de euros si al menos 22,5 millones proceden de cánones.

Las empresas también tendrán que integrar la diligencia debida en sus políticas y sistemas de gestión de riesgos, y adoptar y poner en marcha un plan de transición que haga compatible su modelo de negocio con el límite de calentamiento global de 1,5 ºC previsto en el Acuerdo de París. El plan de transición debe incluir los objetivos de la empresa en materia de cambio climático con plazos concretos, las medidas clave para alcanzarlos y una explicación, con cifras, de las inversiones necesarias para aplicar el plan.

Responsabilidad civil y multas

Las empresas serán responsables si no cumplen sus obligaciones de diligencia debida y tendrán que indemnizar íntegramente a sus víctimas. También tendrán que adoptar mecanismos de denuncia y comprometerse con las personas y comunidades perjudicadas por sus acciones.

Los Estados miembros designarán una autoridad supervisora encargada de vigilar, investigar e imponer sanciones a las empresas que no cumplan. Estas pueden incluir multas de hasta el 5% del volumen de negocios neto mundial de las empresas. Las empresas extranjeras deberán designar a un representante autorizado con sede en el Estado miembro en el que operen, que se comunicará con las autoridades supervisoras sobre el cumplimiento de la diligencia debida en su nombre. La Comisión creará la Red Europea de Autoridades de Supervisión para apoyar la cooperación entre los organismos de supervisión.

Cita

Tras la votación en comisión, la eurodiputada Lara Wolters (S&D, Países Bajos) ha declarado: «Estoy encantada de que una clara mayoría de miembros de la Comisión de Asuntos Jurídicos haya respaldado hoy la Directiva de Diligencia Debida. Ya es hora de que se adopte esta legislación, para poner fin a los abusos corporativos y dar a las empresas claridad sobre lo que se espera de ellas. Espero con impaciencia la votación en el Pleno y confío en que se apruebe rápidamente».

Próximos pasos

Una vez aprobada formalmente por el Parlamento Europeo y los Estados miembros, la Directiva entrará en vigor a los veinte días de su publicación en el Diario Oficial de la UE.