España recorta distancias con las grandes economías europeas al esquivar el parón de la eurozona
El PIB nacional supera ya un 2,1% el nivel precovid, una cifra que mejora los resultados de Alemania o Francia.
La economía europea lleva doce meses estancada. La inflación, alimentada por la crisis energética y las fuertes subidas de tipos del Banco Central Europeo (BCE) han congelado el crecimiento en el Viejo Continente. Sin embargo, en ese tiempo España ha conseguido mantener un nivel de actividad considerable que ha permitido al país recortar parte de la distancia perdida durante la pandemia respecto a sus vecinos más adelantados.
Los datos de la contabilidad nacional europea conocidos el pasado martes dibujan un panorama poco alentador. En el tercer trimestre de 2023 la economía de la eurozona apenas había crecido un 0,1% en comparación con el mismo trimestre de 2022. De hecho, entre julio y septiembre el PIB del área del euro se contrajo un 0,1% si se mide frente al segundo trimestre del año.
En cambio, la situación en España ha sido notablemente diferente. La economía española es ahora un 1,8% más grande que hace un año y en el tercer trimestre el país fue capaz de crecer un 0,3% gracias al sorprendente tirón del consumo.
Recuperación pandémica | Created with Datawrapper
La resistencia de la economía de España en los últimos 12 meses ha permitido que el país tape parte de la brecha que se abrió en 2020, cuando el parón pandémico hundió el PIB español más que en ningún otro país. España no solo sufrió el mayor golpe de toda Europa, también fue uno de los países que más tardó en recuperarse de él. En el segundo trimestre del año pasado, el PIB de España estaba todavía un 0,2% por debajo del nivel registrado antes de la pandemia (cuarto trimestre de 2019). En ese momento, la eurozona en su conjunto ya superaba en un 2,5% el registro anterior al coronavirus.
Sin embargo, las diferencias son ahora mucho menores. En España el volumen de PIB actual está un 2,1% por encima del último trimestre de 2019, mientras que la eurozona supera en un 3% esa referencia. De hecho, tras conocerse los últimos datos, España ya supera los registros de las dos principales economías del euro: Francia —cuyo PIB es ahora un 1,8% superior al de finales de 2019— y Alemania (0,3%). Además, si las previsiones de los principales analistas se cumplen, España sería, dentro de las grandes economías de la UE, la que más habrá crecido desde que estalló la pandemia.
¿Por qué ha resistido mejor España?
La mayor resistencia de la economía española en estos últimos doce meses tiene dos grandes protagonistas: las exportaciones y el consumo. En el final de 2022 y el arranque de 2023, las ventas en el extranjero fueron prácticamente el único motor de crecimiento en España y en la eurozona. Sin embargo, el bajón del consumo y de la inversión contrarrestaron la aportación negativa del sector exterior en la eurozona, lo que provocó que la economía quedase estancada. En cambio, España consiguió esquivar esos obstáculos y logró crecer en ese periodo.
¿Por qué crece la economía española? | Created with Datawrapper
Cuando las exportaciones se frenaron en seco con la llegada de la primavera, España se encontró con un motor con el que no ha podido contar la eurozona en su conjunto: el consumo. El gasto de las familias españolas y las administraciones públicas ha conseguido mantener la economía española en movimiento en los últimos dos meses.
Este efecto se explica en gran parte gracias al buen comportamiento del mercado laboral español. España es, de las grandes economías del euro, la que más empleo ha creado desde la irrupción de la pandemia. El número de personas ocupadas en España era en el segundo trimestre un 4,8% superior al que se registraba a finales de 2019. Francia (3%), Alemania (1,6%) o Italia (1,2%) han registrado crecimientos del empleo más modestos. La bajada de la inflación y la creación de empleo han favorecido que los hogares españoles hayan seguido gastando, lo que ha impulsado el crecimiento.
Empleo | Created with Datawrapper
La resistencia de la economía española se explica, además, por la composición sectorial del país, como señaló recientemente el Banco de España. En España, el sector turístico —que ha vivido un boom en toda regla este año— tiene un peso en la economía mucho mayor que en otros países de Europa. También juega a favor de España que la industria —uno de los que más afectados se han visto por la crisis— tenga un papel menos relevante que en países como Alemania. A esto hay que añadirle que los nexos económicos entre China y España son también más débiles que en el conjunto de la eurozona.
Incertidumbres y cicatrices
La duda ahora está en si España será capaz de resistir el estancamiento en el que ha caído la economía europea durante mucho más tiempo. Las perspectivas para el cuarto trimestre apuntan a una nueva ralentización, pero con cifras de crecimiento todavía positivas. El repunte esperado de la inflación y el efecto de las subidas de tipos de interés tenderá a frenar el consumo.
Cicatrices de la Gran Recesión | Created with Datawrapper
Además, es importante recordar que, aun en el caso de que España saliera fortalecida de esta crisis, las cicatrices que dejó la Gran Recesión de 2008 todavía perduran. Si ampliamos el foco y analizamos cómo ha evolucionado la economía española desde 2008 en comparación con otros países, las distancias son todavía muy grandes.
El PIB de España se sitúa ahora un 8,9% por encima del nivel que registraba en el tercer trimestre de 2008, cuando se produjo la quiebra de Lehman Brothers. En cambio, el conjunto de la eurozona ha crecido un 13,2% desde aquella fecha, con Alemania (15,4%) y Francia (13,7%) con registros muy superiores a los de España. De hecho, España es el cuarto país de la eurozona que menos ha crecido desde la gran crisis financiera. Solo Grecia —cuya economía es todavía hoy un 20% más pequeña que entonces—, Italia y Finlandia han avanzado menos.
