El fiasco de la agenda de la Eurocámara podría retrasar las comparecencias de los comisarios

Es muy poco probable que el equipo de Ursula von der Leyen pueda empezar en noviembre

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No hay forma de escapar a la burocracia, ni siquiera cuando se trata de crear una Comisión Europea.

La complejidad de los calendarios y el largo proceso de selección de los candidatos a Comisarios en función de sus conflictos de intereses han echado por tierra las esperanzas de que la Comisión se pusiera en marcha en noviembre.

Ahora, es probable que la fecha de inicio de la nueva Comisión se retrase hasta principios de diciembre, según han declarado a POLITICO ocho legisladores de la UE, funcionarios parlamentarios y diplomáticos europeos.

El complicado funcionamiento interno de la programación del Parlamento Europeo ha supuesto un duro despertar para los burócratas de Bruselas que regresan de las vacaciones de verano, con el inicio de la próxima Comisión ya cerca de las Navidades, según explicaron los funcionarios.

El Parlamento Europeo no parece tener prisa por dar el visto bueno al próximo grupo de comisarios europeos, ni por presionarles para que empiecen a trabajar en carteras clave como competencia, defensa y comercio, a pesar de que la guerra de Rusia en Ucrania y la proximidad de las elecciones en Estados Unidos exigen que continúe el trabajo del ejecutivo de la UE.

La lista original de audiencias previstas para finales de septiembre era «excesivamente optimista», dijo un alto funcionario parlamentario, que, como los demás citados en el artículo, obtuvo el anonimato para hablar con libertad.

El funcionario señaló que los retrasos se debían, en parte, al complicado calendario de viajes del Parlamento (los eurodiputados tienen previsto desplazarse a Estrasburgo la última semana de septiembre y dos semanas de octubre).

Las audiencias suelen celebrarse en Bruselas y trasladarlas a Estrasburgo sería una pesadilla logística, señaló el alto funcionario.

«No hay prisa», añadió el funcionario, argumentando que tanto el Parlamento como los nominados se beneficiarán del tiempo extra. «Los nominados quieren tantos días como sea posible para prepararse».

El probable retraso es un nuevo revés para la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que lucha por alcanzar su objetivo de una institución equilibrada entre hombres y mujeres. Hasta ahora, sólo hay 9 mujeres candidatas y muchas capitales de la UE se resisten a las presiones para que cambien sus candidatos masculinos por femeninos. A principios de esta semana, por ejemplo, el Gobierno esloveno reiteró públicamente que Tomaž Vesel seguiría siendo el elegido de Liubliana.

Eric Mamer, portavoz jefe de la Comisión Europea, dijo que «corresponde al Parlamento Europeo fijar el calendario de las audiencias».

Tras las elecciones al Parlamento Europeo celebradas a principios de junio, Bruselas esperaba que la nueva Comisión se pusiera en marcha lo antes posible.

La creación de una nueva Comisión es siempre un proceso oportuno y engorroso, ya que las distintas capitales europeas tienen que enviar sus candidatos a von der Leyen, que ahora está repartiendo las carteras entre los candidatos. Aun así, la esperanza era que la nueva Comisión entrara en funciones el 1 de noviembre, justo antes de las elecciones estadounidenses.

Pero ese plazo parece ahora prácticamente imposible, ya que todos los comisarios, salvo von der Leyen, deben someterse a un interrogatorio de horas por parte de los eurodiputados, y no es probable que esas audiencias comiencen hasta mediados de octubre. Inicialmente, el Parlamento esperaba celebrar las audiencias a finales de septiembre.

Eso significa que la votación final de confirmación de toda la Comisión no tendría lugar hasta la sesión plenaria del Parlamento de la última semana de noviembre, lo que retrasaría la fecha de inicio a diciembre en el mejor de los casos.

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Fuente: European Parliament’s scheduling fiasco risks delaying commissioner hearings – POLITICO