Podemos, la Francia Insumisa y otras fuerzas fundan un nuevo partido de izquierdas en Bruselas

Ahora el Pueblo, que crearon Iglesias y Mélenchon en 2018, se estructura en Alianza Europea de Izquierdas en el Parlamento

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Podemos, la Francia Insumisa, el Bloco portugués y otras fuerzas de la izquierda alternativa europea han lanzado un nuevo partido en el Parlamento Europeo bajo el nombre de Alianza Europea de Izquierdas por los pueblos y el planeta. Se trata de una organización al margen de las izquierdas tradicionales, enmarcadas en el Partido de la Izquierda Europea (PIE) -en el que están Izquierda Unida, el Partido Comunista Español, Syriza o Die Linke-, pero también de los socialistas y los verdes. Con todo, van a convivir en el grupo de La Izquierda o The Left. Lo registraron el pasado 29 de agosto en la Autoridad para los partidos y fundaciones europeos, que todavía tiene que acometer su tramitación.

Nuevo partido de izquierdas en Bruselas

Tal y como recoge la legislación europea, son mínimo siete las fuerzas nacionales que conforman esta formación. Junto a la Francia Insumisa, Podemos y el Bloco, que son quienes han liderado esta iniciativa, se han unido la Alianza de Izquierdas finlandesa, el Partido de la Izquierda sueco, los daneses de Enhedlisten y los polacos de Razem; mientras su dirección la forman la sueca Malin Björk y la portuguesa Catarina Martins como presidentas; la francesa Sophie Rauszer será su secretaria general; la polaca Zofia Malisz la tesorera, e Isa Serra como administradora. Se evidencia así la brecha de todas estas formaciones con el PIE, pero especialmente de los danseses, que estaban en Bruselas bajo su paraguas.

«Es necesaria la más amplia unidad de lucha y movilizaciones populares en toda la Unión Europea. La Izquierda Verde Europea debe fortalecerse y organizarse, y el Bloco está comprometido con esta tarea. El Partido de la Izquierda Europea no ha cumplido esta tarea y ahora ve debilitada su capacidad política por la fragmentación interna, fruto del sectarismo frente a las fuerzas de la plataforma Ahora el Pueblo, a la que pertenece el Bloco», adelantaron los portugueses en un comunicado compartido tras las elecciones del pasado 9 de junio en el que destacaba que la distancia con la Izquierda Europea aumentó a raíz de los posicionamientos políticos ante la invasión en Ucrania por parte de Rusia.

Este nuevo grupo va a afectar al PIE no solo a nivel ideológico, sino también en la economía. En este último punto, cabe señalar que pierde la contribución directa de las fuerzas que se han marchado así como la subvención por número de eurodiputados -como Enhedlisten o algunos de la Francia Insumisa-. En el primer punto, ya han criticado la división política que se evidencia con la creación de un partido más. «Siempre hemos defendido que haya espacios unitarios. Es una pena que se pueda visibilizar una división en este momento de auge de la extrema derecha en Europa», señalan en declaraciones a elDiario.es. Por su parte, desde Podemos defienden que se trata de dar empaque a la plataforma Ahora el Pueblo que crearon en 2018. «Es lógico que recorra ese camino de transformación», afirman.

Ya se intentó en 2018

Y es que es precisamente en esa agrupación donde se encuentra el origen de Alianza Europea de Izquierdas por los pueblos y el planeta. El 12 de abril de 2018 se reunieron en Lisboa el entonces dirigente de los morados Pablo Iglesias con el líder de la Francia Insumisa Jean Luc Mélenchon y del Bloque portugués Catarina Marins, y allí firmaron una declaración «por una revolución democrática en Europa», lo que dio lugar a la alianza Ahora el Pueblo. «Nos hemos cansado de esperar. Nos hemos cansado de creer a quienes nos gobiernan desde Berlín y desde Bruselas. Nos ponemos manos a la obra para construir un nuevo proyecto de orden para Europa», rezaba el comunicado.

«Un orden democrático, justo y equitativo que respete la soberanía de los pueblos. Un orden a la altura de nuestros anhelos y de nuestras necesidades. Un orden nuevo, al servicio del pueblo«, añadían los firmantes, quienes tenían a la vista las elecciones europeas del siguiente año, en 2019. Pero especial relación tuvo la izquierda alternativa de Francia y España. Mélenchon viajó a Madrid unos meses después para protagonizar un acto junto a Iglesias, pero también se incorporaron a la iniciativa los suecos Vänsterpartiet, los daneses Enhedslisten y los fineses Vasemmisto, por lo que esto sembró la semilla que ha dado lugar a la estructura actual.

Esta se produce en una coyuntura política dispar para algunas de las formaciones nacionales que la componen. Mientras para Mélenchon es un momento dulce tras las elecciones presidenciales de Francia -en las que no solo frenó a la ultraderecha sino que va a poder formar gobierno-, Podemos no está en su mejor momento. Su ruptura con Sumar y sus debacles electorales han llevado a los morados a tener el foco solo en Europa con Irene Montero al frente. En el Congreso de los Diputados nacional tan solo cuentan con cuatro diputados desde el Grupo Mixto, por lo que ha pasado de estar en Moncloa a perder buena parte de su influencia.