La Comisión Europea presenta la primera estrategia industrial de defensa de la UE

La Comisión Europea y el alto representante han presentado la primera estrategia industrial europea de defensa a escala de la UE y han propuesto un ambicioso conjunto de nuevas acciones para apoyar la competitividad y la preparación de su industria de defensa.

Hace dos años, la guerra de agresión injustificada y en curso de Rusia contra Ucrania marcó el retorno de un conflicto de gran intensidad en nuestro continente. La Estrategia Industrial Europea de Defensa (SEGD) establece una visión clara y a largo plazo para lograr la preparación industrial en materia de defensa en la Unión Europea. Como primer medio inmediato y central para cumplir la Estrategia, la Comisión Europea presenta una propuesta legislativa para un Programa Europeo de la Industria de Defensa (PIDE) y un marco de medidas para garantizar la disponibilidad y el suministro oportunos de productos de defensa.

La Estrategia esboza los retos a los que se enfrenta actualmente la base industrial y tecnológica de la defensa europea (BITDE), pero también la oportunidad de aprovechar todo su potencial y establece una dirección para la próxima década. Para aumentar la preparación industrial de la defensa europea, los Estados miembros deben invertir másmejorjuntos y europeos. Para apoyar a los Estados miembros en la consecución de estos objetivos, la Estrategia Industrial Europea de Defensa presenta un conjunto de acciones destinadas a:

  • Apoyar una expresión más eficiente de la demanda colectiva de defensa de los Estados miembros. Esto se basará en instrumentos e iniciativas existentes, como el Plan de Desarrollo de Capacidades (PDC), la revisión anual coordinada de la defensa (CARD) y la Cooperación Estructurada Permanente (CEP). Se apoyará incentivando la cooperación de los Estados miembros en la fase de adquisición de capacidades de defensa;
  • Garantizar la disponibilidad de todos los productos de defensa a través de una BITDE más receptiva, en cualquier circunstancia y horizonte temporal. Se apoyarán las inversiones de los Estados miembros y de la industria europea de defensa en el desarrollo y la comercialización de las tecnologías y capacidades de defensa más avanzadas del mañana. También se proponen medidas para garantizar que la BITDE disponga de lo que necesita incluso en períodos de crisis, aumentando así la seguridad del suministro de la Unión;
  • Garantizar que los presupuestos nacionales y de la UE apoyen con los medios necesarios la adaptación de la industria europea de defensa al nuevo contexto de seguridad;
  • Integrar una cultura de preparación en materia de defensa en todas las políticas, en particular pidiendo una revisión de la política de préstamos del Banco Europeo de Inversiones este año;
  • Desarrollar vínculos más estrechos con Ucrania mediante su participación en iniciativas de la Unión en apoyo de la industria de defensa y estimular la cooperación entre la Unión y las industrias de defensa ucranianas;
  • Colaborar con la OTAN y nuestros socios estratégicos, afines e internacionales, y cooperar más estrechamente con Ucrania.

La Estrategia establece indicadores destinados a medir los avances de los Estados miembros hacia la preparación industrial. Se invita a los Estados miembros a:

  • Adquirir al menos el 40 % de los equipos de defensa de forma colaborativa de aquí a 2030;
  • Garantizar que, de aquí a 2030, el valor del comercio de defensa dentro de la UE represente al menos el 35 % del valor del mercado de defensa de la Unión;
  • Avanzar constantemente hacia la contratación pública de al menos el 50 % de su presupuesto de contratación pública en materia de defensa dentro de la UE de aquí a 2030 y el 60 % de aquí a 2035.

El Programa Europeo de la Industria de Defensa (EDIP)es la nueva iniciativa legislativa que pasará de las medidas de emergencia a corto plazo, adoptadas en 2023 y que finaliza en 2025, a un enfoque más estructural y a más largo plazo para lograr la preparación industrial en materia de defensa. Esto garantizará la continuidad del apoyo a la base tecnológica e industrial de la defensa europea, a fin de acompañar su rápida adaptación a la nueva realidad.

El EDIP incluye tanto aspectos financieros como reglamentarios. El EDIP movilizará 1 500 millones EUR del presupuesto de la UE durante el período 2025-2027 para seguir mejorando la competitividad de la BITDE. El apoyo financiero EDIP ampliará, en particular, la lógica de intervención del EDIRPA (apoyo financiero con cargo al presupuesto de la UE para compensar la complejidad de la cooperación entre los Estados miembros en la fase de contratación pública) y el ASAP (apoyo financiero a las industrias de defensa que aumentan su capacidad de producción), a fin de seguir fomentando las inversiones de la BITDE. El EDIP también apoyará la industrialización de los productos derivados de las acciones de cooperación I + D apoyadas por el Fondo Europeo de Defensa. El presupuesto EDIP también puede utilizarse para crear un Fondo para acelerar la transformación de las cadenas de suministro de defensa (FAST). Este nuevo fondo tendrá por objeto facilitar el acceso a la financiación mediante deuda o capital para las pymes y las pequeñas empresas de mediana capitalización que industrialicen tecnologías de defensa o fabriquen productos de defensa. El presupuesto del EDIP también mejorará la cooperación industrial de la UE en materia de defensa con Ucrania y apoyará el desarrollo de su base industrial y tecnológica de la defensa. Para ello, el EDIP podría obtener financiación adicional de los beneficios extraordinarios derivados de los activos soberanos rusos inmovilizados (a reserva de la decisión del Consejo a propuesta del Alto Representante).

En cuanto a los aspectos reglamentarios, el EDIP va acompañado de soluciones novedosas. Pondrá a disposición un nuevo marco jurídico, el Programa Estructura para los Armamentos Europeos (SEAP), para facilitar y ampliar la cooperación de los Estados miembros en materia de equipos de defensa, en plena complementariedad con el marco de la CEP. También implica un régimen a escala de la UE para la seguridad del suministro de equipos de defensa, que garantizará el acceso constante a todos los productos de defensa necesarios en Europa y proporcionará un marco para reaccionar eficazmente ante posibles crisis futuras de suministro de productos de defensa. Además, el EDIP permitirá la puesta en marcha de proyectos europeos de defensa de interés común, con potencial apoyo financiero de la UE. Por último, el EDIP propone establecer una estructura de gobernanza, en la que los Estados miembros participen plenamente, para garantizar la coherencia general de la acción de la UE en el ámbito de la industria de la defensa (el Consejo de Preparación Industrial en materia de Defensa).

Una industria europea de defensa más fuerte y receptiva beneficiará a los Estados miembros y, en última instancia, a los ciudadanos de la UE. También beneficiará a los socios clave de la UE, como la OTAN y Ucrania.

La brutal guerra de agresión de Rusia contra Ucrania ha devuelto la guerra de alta intensidad a Europa. Tras décadas de infrautilización, debemos invertir más en defensa, pero tenemos que hacerlo mejor y juntos. Una industria europea de la defensa fuerte, resiliente y competitiva es un imperativo estratégico y una condición previa para mejorar nuestra preparación en materia de defensa. También debemos intensificar nuestro apoyo militar a Ucrania, en particular apoyando su base industrial de defensa. Esta Estrategia marca un cambio de paradigma hacia una Unión que sea un actor fuerte en materia de seguridad y defensa y un socio mejor, en consonancia con los objetivos de la Brújula Estratégica.

Alto representante y vicepresidente Josep Borrell

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