La Eurocámara propone reformas para proteger su integridad y transparencia

Los supuestos intentos de influir en los eurodiputados destaparon, entre otras cuestiones, lagunas en el reglamento interno de la Eurocámara, según la comisión especial sobre injerencias extranjeras.

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Los intentos de injerencia son un «fenómeno generalizado que debe ser combatido con la mayor firmeza posible», advierten los eurodiputados, que expresan su «profunda conmoción y condena por las acusaciones de corrupción, blanqueo de dinero y participación en una organización criminal» de tres eurodiputados, un ex eurodiputado y un asistente parlamentario.

La comisión ha detectado «numerosas lagunas en las normas de integridad y transparencia del Parlamento» y pide que la propuesta de 14 puntos del Presidente Metsola para reformar las normas de la Eurocámara se concrete lo antes posible.

Potenciar la denuncia de irregularidades y aclarar las normas sobre conflictos de intereses

En un informe aprobado el jueves por la comisión especial sobre injerencias extranjeras con 25 votos a favor, uno en contra y cinco abstenciones, los eurodiputados piden una rápida revisión del código de conducta de los diputados, también en materia de sanciones. Debería proteger más eficazmente a los denunciantes y aclarar las normas sobre conflictos de intereses. También piden que se introduzca la declaración de bienes.

Es necesario mejorar las normas actuales para revelar el importe de los ingresos paralelos obtenidos, la descripción del cargo que ocupa un eurodiputado y los clientes en cuyo nombre trabajan los diputados a cambio de una remuneración. Los eurodiputados también proponen introducir la prohibición de que los diputados realicen trabajos paralelos remunerados para terceros Estados o entidades dependientes de alto riesgo.

Aunque el diálogo entre los representantes de los grupos de interés y los responsables de la toma de decisiones sigue siendo una «parte vital de la democracia europea», los medios inapropiados de influencia, el soborno y otros delitos penales son inaceptables, subrayan.

Dificultar la contratación de antiguos eurodiputados por parte de actores extranjeros de alto riesgo

Los eurodiputados exigen que el cumplimiento del periodo de reflexión de seis meses para los antiguos eurodiputados sea supervisado por el nuevo órgano de ética de la UE. El Parlamento debe introducir un sistema de control y normas para revocar el acceso a los antiguos eurodiputados que hagan lobby en nombre de países de alto riesgo más allá del periodo de reflexión.

Reforzar la cultura de seguridad como protección contra injerencias extranjeras

Los eurodiputados señalan que países como «Qatar, Marruecos, pero también China, Rusia, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Serbia y Turquía han invertido mucho en actividades de lobby en Bruselas» y afirman que las injerencias extranjeras «no deben quedar sin consecuencias para el país en cuestión». Cualquier propuesta legislativa o no legislativa sobre la cooperación con estas autoridades estatales, incluida la financiación de la UE, debe suspenderse, al tiempo que se preservan los fondos para las organizaciones de la sociedad civil y los medios de comunicación independientes, así como la ayuda humanitaria.

Por último, debería ampliarse el alcance y la supervisión del Registro de Transparencia, al tiempo que todos los eurodiputados deberían tener que declarar las reuniones programadas con representantes de intereses, incluidas aquellas con representantes diplomáticos de países no pertenecientes a la UE. Los informes del Parlamento deberían enumerar las reuniones pertinentes, excluyendo aquellas con personas cuya seguridad pueda estar en peligro.

Próximos pasos

Se espera que la votación final del informe tenga lugar durante la sesión plenaria de julio.