Informe Eurofound «Asequibilidad de la vivienda: enfoques para la medición y datos clave»

Eurofound ha publicado el documento de referencia “Asequibilidad de la vivienda: enfoques para la medición y datos clave”, que analiza los desafíos de acceso a la vivienda en Europa y los diferentes enfoques para medir la asequibilidad. El documento, preparado para la Presidencia danesa del Consejo de la UE, subraya que, aunque algunos indicadores agregados muestran una mejora, la realidad cotidiana de millones de hogares europeos refleja una creciente dificultad para encontrar y mantener una vivienda asequible y adecuada.

Los principales hallazgos son los siguientes:

• Aumento de costes de vivienda: entre 2010 y 2024, los precios de compra subieron un 55,4% y los alquileres un 26,7%, impulsados por la urbanización, la migración, la financiarización del mercado inmobiliario y la falta de oferta suficiente.
• Indicadores contradictorios: la tasa de sobrecarga de costes (gasto en vivienda superior al 40% de los ingresos) ha descendido en términos agregados, pero sigue siendo muy elevada en países como Grecia, Dinamarca y Alemania.
• Nuevos enfoques de medición: además del indicador tradicional, el informe propone enfoques como el residual de ingresos (lo que queda para necesidades básicas tras pagar vivienda), el análisis de calidad habitacional (hacinamiento, carencias), y las percepciones subjetivas de los hogares.
• Grupos más vulnerables: inquilinos en el mercado privado; hogares monoparentales y jóvenes de 18 a 29 años; personas en riesgo de pobreza o exclusión social (AROPE); población urbana, donde la presión de los precios es mayor.
• Indicador 30/40: revela que el 14% de los hogares europeos dedican más del 30% de sus ingresos a la vivienda estando en el 40% más bajo de renta, lo que refleja un fuerte “estrés habitacional”.

El informe confirma que la vivienda se ha convertido en un factor central de desigualdad social en Europa. Mientras las estadísticas agregadas apuntan a mejoras, amplios sectores de la población trabajadora siguen atrapados entre alquileres prohibitivos, hipotecas inaccesibles y viviendas de baja calidad.

Desde UGT consideramos prioritario:

• Reforzar las políticas públicas de vivienda asequible y social, aumentando el parque público en alquiler a precios justos, en línea con lo defendido por UGT en el dictamen del CESE sobre vivienda asequible -del cual la Secretaria de Políticas Europeas, Mari Carmen Barrera, es co-ponente- que reclama situar la vivienda como infraestructura esencial para la cohesión social y territorial.
• Adoptar métricas más realistas que reflejen la diversidad de situaciones, incorporando calidad, renta residual y percepciones ciudadanas, coherentes con los nuevos enfoques planteados tanto por Eurofound como en el dictamen europeo.
• Regular el mercado inmobiliario y frenar la financiarización de la vivienda, tal como subraya el dictamen del CESE, para evitar que un derecho básico siga siendo tratado como un activo especulativo y para garantizar que las inversiones en vivienda puedan quedar exentas de las restricciones fiscales del Pacto de Estabilidad.
• Proteger a los colectivos más vulnerables (jóvenes, hogares monoparentales, personas en pobreza) mediante subsidios específicos, medidas de acceso preferente y herramientas financieras europeas, como la Plataforma Europea de Inversión en Vivienda propuesta en el dictamen del CESE.
• Integrar la vivienda en la negociación colectiva, reconociendo que el coste residencial condiciona directamente la calidad de vida de las personas trabajadoras, y vinculando esta reivindicación al enfoque europeo que UGT impulsa para reducir la desigualdad territorial y combatir el estrés habitacional.